Los Fondos de la política de cohesión 2021-2027 complementan y refuerzan los Fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) desde una perspectiva de cohesión territorial, abordando las desigualdades persistentes entre las regiones hacia un desarrollo más equilibrado y sostenible.
A su vez, esta política incluye otros retos como la necesidad de adaptarse a los cambios demográficos y tecnológicos, o enfrentar los impactos económicos y sociales de la pandemia. Las oportunidades radican en impulsar la transición hacia una economía verde y digital, promover la innovación, fortalecer el capital humano y fomentar la colaboración entre las regiones.
El conjunto de los programas de la política de cohesión encuentra su marco normativo en el Reglamento (UE) 2021/1060 de Disposiciones Comunes (RDC), que recoge principios y disposiciones de aplicación general a los mismos.
En el nuevo marco se han fijado cinco prioridades para las inversiones de la UE en desarrollo regional en el periodo 2021-2027:
Una Europa más inteligente, mediante la innovación, la digitalización, la transformación económica y el apoyo a las pequeñas y medianas empresas;
Una Europa más ecológica y libre de carbono, que aplique el Acuerdo de París e invierta en transición energética, energías renovables y la lucha contra el cambio climático;
Una Europa más conectada, con un transporte estratégico y redes digitales;
Una Europa más social, que haga realidad el pilar europeo de derechos sociales y que apoye el empleo de calidad, la educación, las capacidades educativas y profesionales, la inclusión social y la igualdad de acceso a la asistencia sanitaria;
Una Europa más cercana a los ciudadanos, que respalde estrategias de crecimiento de gestión local y que contribuya a un desarrollo urbano sostenible en toda la UE.
A estos cinco objetivos políticos prestan su apoyo el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) y el Fondo de Transición Justa (FTJ).
La política de cohesión beneficia a todas las regiones de la Unión Europea y el nivel de inversión refleja las necesidades de desarrollo de los Estados miembros. Las regiones se clasifican según su Producto Interior Bruto (PIB). Para el periodo 2021-2027, Castilla y León se clasifica como región en transición.